sábado, 13 de septiembre de 2008

Hermanas...

Hermanas ... El tiempo nos enseña a conocernos, a respetarnos y a entendernos un poco más cada día. En nuestro caso así ha sido, con el tiempo y sobre todo con tu ayuda mi pequeño Hu, tu madre y yo hemos acortado en distancias y aumentado en cariño. Tu existencia hace que cada día hablemos por teléfono y que la vuelva loca con un nuevo proyecto para ti . Tu eres nuestro punto de unión, de acercamiento y como prueba de ello me gustaría que leyeses un email que me envió el otro día. Soy yo, el milagro de tu hermana. Para milagro tener una hermana como tú, siempre a mi lado incluso cuando éramos pequeñas y nos peleábamos tanto,dicen que las más reñidas.......Desde entonces TE QUIERO un montón, aunque fueses rubia y con los ojos azules, pero la más simpática sigo siendo yo, vamos a llevarnos bien ¡EHHH!

CLARO QUE ME SIENTO ORGULLOSA DE TI, más que eso, te admiro. Te prometo que voy a intentar transmitir a mi hijo o hija todos esos valores que nos han enseñado en el seno de de nuestra familia y si alguna vez dudo, ya sé en quien puedo apoyarme sin tener miedo a equivocarme. Y ahora a enviar este comentario, espero que esta vez lo pueda conseguir.
BESOS Y ACHUCHONES.

2 comentarios:

Jesús y Ana dijo...

Hola Rocío,
yo también tengo una hermana y me identifico mucho con vosotras.

Un beso para las dos.

Ana

Silvia - Desenredando el hilo rojo dijo...

Es precioso. Hermanos, hermanas... no importa. Un lazo como el hilo rojo nos une, nos unió... y así será para siempre.

Hermanas... ¡una palabra tan grande!

Besos